Problemas sociales, familiares y económicos encausan a muchos niños y niñas a perderse en la vida callejera. Luego quedan expuestos a peligros como la droga,la explotación sexual, la violencia y la delincuencia – inclusive a la muerte. Mucho más allá que la mera asistencia, nuestro Programa Calle siempre tiene el fin de animar y posibilitar la salida de estos jóvenes de la calle, por medio del reencuentro con la familia o la ubicación en un hogar sustituto.
La formación deportiva y académica se inicia en la calle misma. Con cariño, humor y paciencia, nuestros profesionales promueven procesos de cambio para que los jóvenes aprendan a valorarse más a si mismos y a los demás.